El hecho
ocurrió a las 12.45 en la institución crediticia situada en la
avenida Juan B. Justo 7132, entre Goya y Segurola, hasta donde
llegaron cuatro hombres armados, en un automóvil Ford Fiesta negro
y al parecer apoyados por otro vehículo con dos ocupantes.
"Parecían enloquecidos", dijeron testigos a personal de
la comisaría 43 que concurrió al lugar instantes después que
los ladrones escaparon.
Las patrullas de la seccional fueron hasta el lugar en respuesta a
la alarma insonora que comunica al banco con la seccional de
Floresta Norte, accionada por personal del banco atracado.
Antes de ingresar al banco, los asaltantes sorprendieron
al policía que estaba en la puerta, un agente de 30 años.
Amenazándolo con las armas, llevaron al policía hasta
una peluquería vecina al banco, donde le quitaron el
chaleco antibalas, la pistola reglamentaria y lo agredieron a
trompadas.
Antes de irse y ya habiéndolo reducido, le dispararon,
desde varios metros, tres balazos que dieron en la espalda del
agente.
Uno de los tiros le rozó la nuca y otro impactó en la espalda, en
la zona lumbar, y el tercero a la altura del hombro derecho.
Luego ingresaron al banco y a los gritos ordenaron a clientes y
empleados que se arrojaran al piso y no se movieran "o eran
boleta", dijeron testigos a personal de la comisaría 43.
Uno de los asaltantes redujo al vigilador privado, que actúa sin
armas, otros dos se quedaron apuntando al público y empleados y el
otro se llevó el dinero de la caja de atención habilitada.
De inmediato se fugaron y ya en la calle comenzaron a disparar sus
armas a mansalva, no se sabe si para amedrentar a quienes habían
quedado dentro del banco o por el estado de excitación en que
encontraban, comentaron los testigos.
Tal fue la manera "enloquecida" con que accionaron sus armas, que
uno de los proyectiles disparados destrozó la luneta trasera del
propio auto en que habían llegado los delincuentes.
No obstante esa rotura, los atracadores se subieron al Ford Fiesta
y huyeron por la avenida Segurola en dirección a la
avenida Rivadavia, pero lo abandonaron unas cinco cuadras más
adelante, en Aranguren y Goya.
Allí se perdió la pista de los ladrones, que habrían subido
al auto de apoyo que los siguió desde el banco.
El policía herido fue trasladado por sus compañeros al hospital
Vélez Sarsfield.
Hasta ese centro de salud concurrió un helicóptero, que bajó en la
plaza Don Bosco y trasladó a la víctima al hospital
policial Churruca-Visca.
En la guardia de emergencia del complejo policial los
médicos lograron detener la hemorragia y estabilizar los
parámetros vitales del agente herido, que quedó internado "con
pronóstico reservado", comentó la fuente.
Las autoridades del banco Francés no informaron sobre el monto
sustraído, porque primero debía realizarse un arqueo de caja por
personal de la casa central.