SE IMPIDIÓ EL
ASFALTADO DE LA CALLE BACACAY
Salvar a
Floresta vigila
28/10/2010
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El día martes 19 de
octubre en horas de la mañana, una cuadrilla (perteneciente
al Ente de Mantenimiento Urbano Integral) intentó asfaltar
la cuadra de la calle Bacacay comprendida entre Bahía Blanca
y Chivilcoy. Este accionar, que pudo ser detenido por la
pronta intervención de integrantes de la "Asociación Civil
Salvar a Floresta", deja a las claras la no intensión de
respeto de la ley por parte del Gobierno de la ciudad, ya
que la calle mencionada está comprendida dentro del
Área de Protección Histórica (APH Floresta) poseyendo un
adoquinado centenario.
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Emilio
Juan Vattuone nos cuenta en su libro "La Floresta -
Nuestro Barrio - Reseña Evocativa", que las primeras
calles empedradas de Floresta datan de 1911. Las obras
se iniciaron en el mes de octubre con adoquines
graníticos y base de hormigón. Esta información surge de
los Libros de Ordenanzas del Concejo Deliberante.
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Las primeras
calles en recibir las mejoras fueron "Esperanza" (Joaquín V.
González), Azul y Pergamino. También se empedraron: Bacacay
(desde Cuenca hasta Segurola), Chivilcoy (desde Rivadavia
hasta Bogotá), Mercedes y Gualeguaychu, y luego varios
segmentos más.
Los vecinos de
Salvar a Floresta comentan: "Es una tendencia mundial, en
las principales ciudades del mundo, priorizar y mantener con
gran celo el patrimonio cultural propio, cuidando, entre
otras cosas, los viejos pavimentos. En Buenos Aires parecer
que todo es al revés".
"Sabemos que
el sistema de reparaciones de las calles adoquinadas se ha
regido sólo por un criterio de minimizar el gasto, pero los
adoquinados de Floresta no sólo están protegidos por la ley
del APH, también se encuentran protegidos por la ley 65, que
simplemente prohíbe levantar los adoquinados en las
Areas de Protección Histórica y en el Casco Histórico".
"Desde Salvar
a Floresta nos resulta inconcebible que a más de un mes de
publicada la
Ley 3507 (“Area de
Protección Histórica Floresta”) donde se hace hincapié en la
protección del empedrado, la ley 85, más distintos fallos de
la justicia con relación a este tema, ningún integrante del
Gobierno de la Ciudad se “haya enterado” de las
prohibiciones. Pareciera ser que ningún funcionario (no
importa su rango) no hace algo tan simple como leer el
Boletín Oficial". Pensamos que si lo hubiesen leído se
evitarían varias demandas por mal desempeño de funcionario
público".
"El
adoquinado de la Ciudad y de nuestro barrio es parte de
nuestra identidad, es parte de nuestra historia y parte
indiscutible de nuestro patrimonio cultural. Sumado a esto,
los beneficios que conlleva el pavimento (suelo) adoquinado
son claros e incuestionables, para su preservación.
Carlos Davis
Fuente:
Prensa Asociación Civil Salvar a Floresta