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49.-
Leonardo Oscar Tidona
- Parte III
leotidona@gmail.com
Dolores y Rafaela
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=?L %n|1Ȓ[GTtp aҼ\9?[WNn4KLmw,og{alle estaban
bien cerradas y a las
personas que circulaban por
ah.
La basura se sacaba en
tachos (siempre los mismos),
los cuales eran vaciados por
los recolectores, dentro de
una chata tirada por
caballos. Luego vinieron los
camiones.
El lechero haca el reparto
con un carro tirado por un
caballo, el cual, se
anticipaba a su dueo, yendo
solo, a la puerta del
prximo cliente. La leche
vena en tachos especiales
y, se fraccionaba la
cantidad que el cliente
requera. Eso si, haba que
hervirla pronto para que no
se cortara. Al tiempo,
empez a venderse
pasteurizada y en botellas
de un litro, pero siempre a
domicilio.
El consumo de luz se le
pagaba a un cobrador, que
iba, a cada domicilio, a
repartir las facturas.
Estaba el oficio del tachero
que, reparaban los baldes,
fuentones y cacerolas,
colocndoles remaches donde
se hacan los agujeros en el
metal.
Los colchoneros, arreglaban
los colchones de lana que,
con el uso se iban
compactando y se volvan muy
incmodos para dormir. Con
una mquina cardadora se
repasaba toda la lana y as
el colchn volva a quedar
bien mullido.
El botellero, compraba
diarios, revistas, hierro,
bronce y botellas, pesaban
todo con una balanza romana.
Los vendedores, siempre
sospechaban que, la balanza
estuviera truchada, para dar
un peso menor.
Para la alegra de los
chicos pasaban por el
barrio, vendedores de
helados, de pirulines (un
caramelo largo de forma
cnica, con un palito para
sostenerlo), el barquillero
con sus barquillos (unos
cilindros de pasta como los
cucuruchos de los helados),
que eran transportados en
una caja, con una especie de
ruleta en la parte superior,
que si uno acertaba, se
llevaba uno o dos ms de
premio. Tambin, pasaban por
el barrio, el manicero y el
vendedor de pochoclos, de
manzanas con un bao de
caramelo y de una especie de
algodn de azcar.
Algo enternecedor, era la
Cotorrita de la Suerte, de
un cajoncito lleno de
papelitos rosas y celestes,
con predicciones del futuro.
El ave elega uno
con el pico y se lo
entregaba al hombre o a la
mujer.
Cada tanto apareca el
vendedor de pavos, las aves
( unas 20 o 30) recorran
las calles, sueltas y
agrupadas, alrededor del
pavero y este las guiaba con
una vara larga.
En la calle Rivadavia,
estaba la casa de copraventa
de muebles Baralia, con el
tiempo se fueron agregando
otras ms.
Gabino Ezeiza, el ms grande
payador, de todos los
tiempos, del Ro de la
Plata, vivi en la calle
Azul 92.
Otro famoso fue el
periodista Roberto Maidana
que viva en Rafaela. Al
actor Semillita, lo conoc,
jugando al ftbol, en el
Parque Avellaneda.
Un personaje era Chuenga,
que venda unos caramelos
masticables, que el mismo
fabricaba (luego aparecieron
los sugus). Ningn evento
era importante, si el no
estaba presente con sus
golosinas.
El vecindario, estaba
integrado por familias de
trabajo y el trato entre
ellos era amigable y
afectuoso (no faltaban los
chismes, algunas broncas y
malentendidos).
La mayora de los muchachos
y chicas, estudiaron y/o
trabajaron y luego formaron
su hogar.