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33 .-
Marta
Liliana Carranza
- Parte III
lilianacarranza2002@yahoo.com.ar
Aranguren y Belén
Y en esta Parte III siguen
apareciendo más recuerdos:
la fogata de San Pedro y San
Pablo que todos los años
hacíamos los chicos en el
medio de la calle frente a
la casa de la familia
Luciani en la ex-San Eduardo
al 4400. Los pibes hacíamos
guardia para que nadie la
derrumbara, y luego en su
fecha la prendíamos fuego y
festejábamos.
...el
paseo en tranvía de la línea
1, 2 y 5 que salían de
Falcón y Lacarra, el
trolebús 114 que pasaba por
Segurola, la calesita de Don
Luis en Segurola y las vías
del ferrocarril donde
siempre él nos daba una mano
para sacar la sortija y
tener una vuelta más gratis,
el trencito del Parque
Avellaneda, sus juegos y su
calesita. También estaba el
comercio de Segurola y
Venancio Flores donde
vendían aceite suelto
(además de otros productos),
el carbonero y papero de
Morón y Belén, la panadería
"El Cañón" de Carrasco y
Saráchaga.
...Y
que decir de los recuerdos
más lejanos..., siendo muy
chica, escuchaba el silbato
de "el sereno" que nos
transmitía que todo estaba
tranquilo en la noche para
poder descansar.
...Los
árboles frondosos, "los
paraísos" que con sus flores
perfumadas nos envolvían,
como de los jazmines
diferentes que estaban en
las casas. De los crudos
inviernos que nos obligaban
estar temprano en nuestras
casas para poder entibiarlas
con las estufas que cada uno
poseía, el calentador, las
estufas de velas a kerosene,
las de garrafas, y los que
económicamente estaban mejor
tenían radiadores en cada
cuarto.
...recuerdo
la vidriería de la familia
Rizzo en Aranguren y Belén.
Mi parroquia "Del Buen
Consejo" en Cardoso al 200
donde me bautizaron y me
casé. Allí también asistía a
misa todos los domingos a
las 19 hs el periodista
deportivo Enrique Macaya
Márquez, quién vivía en
Milton y Yerbal, luego se
mudó a Goya y Avellaneda.
Siempre saludaba a la gente
de una forma muy cordial,
como lo que era, un vecino
más.
...Y
que decir de la iluminación
de las calles, eran
colgantes, una en cada
esquina y otra a mitad de
cuadra en forma de campana
de color negro con una
bombita de luz muy tenue!!!.
Quería aclararles que en mi
relato anterior comenté de
la amistad de Daniel Hadad
con Fernando Pisano , la
inmobiliaria no era de
ambos, sino sólo de la flia.
Pisano, ellos eran amigos de
la infancia, fueron al
colegio el Instituto
Sarmiento en Flores, pero
solían estar juntos en el
negocio. ¿Quién no ha
caminado por las callecitas
de Floresta?, creo que el
que vive o vivió no dejará
de reconocer cada uno de sus
rincones...