Ver mapa ampliado

23.- Carlos Bianchi - (bianchi.ce@gmail.com)
Pasaje Las Acacias 1300

Quisiera compartir con ustedes mi historia acerca del barrio, sin duda es una historia singular, la comparto para que puedan ver hasta donde el barrio ha trascendido.

Antes que todo soy guatemalteco de nacimiento, argentino por convicción, desde chico tuve el sueño, de conocer el que para mi es el país más lindo del mundo. No se porque, pero desde que tengo uso de memoria, Argentina está presente en mi vida.

Nací en el '77 y tengo mi primer recuerdo del país cuando veia por la TV a Raul Alfonsín, la Casa Rosada, el Obelisco, en fin... Todo esto sin duda se acrecentó durante el mundial del '86 obvio, el fútbol, el Diego (ahora con el showbol se me cumplió el sueño, lo vi jugar en El Salvador y en Guatemala). En fin no quiero alargar la historia, solo quiero decirles que amo Argentina, en mi casa todo tiene que ver con su hermoso país, la remera de mi chico firmada por el Diego está en la sala, el dormi del niño pintado con los colores de boca, mi colección de mate (bebo mate todos los días, como dulce de batata -nunca faltan en casa-), los tangos, los asaditos...

Pero lo que quiero compartirles es que en el 2006 tuve la bendición de conocer Argentina y de vivir en el Barrio Floresta por 10 días, en el pasaje Las Acacias 1364, muy cerca de la plaza "Ciudad de Udine".

... Y si estoy enamorado de Argentina, el Barrio es mi delirio, jamás borraré de mis recuerdos esas maravillosas mañanas calurosas y húmedas de diciembre, con la vista de las casas de los pasajes construidas en tiempos del General Perón, las cuales son hermosas y en el entrada siempre tienen un pequeño patio (al menos las que conservan las formas originales, otras, las remodeladas, ya no lo tienen).

Siempre salia a respirar ese aire maravilloso, caminando por Mercedes, Camarones, la Av. Gaona...

También estuve por Cotto, comí la mejor pizza del mundo, comprada ahí en la esquina, en la pizzería que atiende la mamá con los chicos, maravilloso. Compré cigarrillos en el kiosko de Moncho, tomé el colectivo..., en fin, fue sin dudas la mejor experiencia de mi vida, espero por supuesto volver, ahora tengo una familia allá, y espero tener la suficiente "guita" para comprar una casa en Floresta, barrio lindo que cumple años el mismo día que mi vieja...

Saludos a todos de quien a miles de kilómetros de distancia suspira por el barrio.