Las acciones de este movimiento cultural están acompañadas por distintos textos, como los trabajos de los escritores peruanos Alejandro Sánchez-Aizcorbe y Marcela Valencia Tsuchiya, que pasaron por la Feria del Libro de la Ciudad de Buenos Aires con sus libros "El gaznapirón" y "Jorge Pimentel en su hora zero", respectivamente.

En esa línea, el poeta porteño Norberto Barleand anunció que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires tendrá un Bosque de la Poesía en cada parque público.

Por su parte, Teuco Castilla, reseñó a Télam la breve y nutrida historia de los Bosques: “Una tarde en Villa Carlos Paz, con los poetas Pedro Solans y Aldo Parfeniuk, veíamos cómo las llamas devoraban las sierras cordobesas, sus árboles, sus animalitos, todas las criaturas del monte a merced de los incendios intencionalmente provocados por los especuladores, incendios que luego se propagarían por todo el planeta".

"De esa desolación -y de esa indignación también-nació la idea de crear el Movimiento de los Bosques de la Poesía, un gesto simbólico pero también real, que despertara la conciencia de todos para hacer algo, y que contribuyera -aunque fuera un pequeño intento- para preservar la vida en la tierra", explicó.

para que la naturaleza sea declarada por ley sujeto de derecho en la Argentina.

Villa Carlos Paz fue el primer municipio en el mundo que inauguró su bosque de la poesía, en el predio de este Parque Estancia de la Quinta. Ese día, distintos poetas y artistas recorrieron los senderos el predio hasta llegar al centro del bosque donde se plantaron algarrobos, moradillos, sen del campo, molles, espinillos, talas, chañares, y donde quedarán las poesías aportadas por los poetas.

"Desde entonces, gracias también a la sensibilidad de intendentes y alcaldes de muchos lugares, se multiplicaron por toda la Argentina, por Latinoamérica y ahora en España”, contó Teuco Castilla, el hijo del inolvidable autor salteño Manuel J. Castilla.

"¿Y por qué la poesía? "Porque ella custodia, desde hace siglos, la armonía del hombre con la naturaleza. Y también la armonía del hombre con el hombre, que todavía no comprende que cuando quema un árbol él también se quema, y que cuando envenena las aguas, él mismo se envenena", apuntó.

De estas ponencias, indicó el chaqueño Pedro Solans, "y con esta conciencia, fue que junto a los Bosques de la Poesía y con la valiosa intervención de destacados juristas, redactamos un proyecto de Ley que declare a la naturaleza sujeto de derechos".

"Con la poesía construimos esta pequeña arca que ahora tripulan también músicos y pintores, y que avanza dejando en cada bosque un Centro Cultural al Aire Libre. O sea, la creación para defender a la creación, porque es la especie humana la que está en peligro", concluyó.