breve historia de la
educación popular de jóvenes y adultos
La educación popular
22/12/2023
- El 27 de noviembre se conmemoró
el Día de la Educación de Jóvenes y Adultos/as (EDJA). En
esta fecha de 1973, durante la tercera presidencia
peronista, fue creada la Dirección de Educación de Adultos
(Decreto 4626/73). Constituyó una política educativa pública
y popular que permitió otorgarle autonomía, ya que hasta esa
fecha dependía de las escuelas primarias. Desde los años '50
hasta los '70 se van a profundizar los debates y la pugna de
concepciones sobre la formación de jóvenes y adultos. Luego
del derrocamiento del peronismo (1955) la gestión estatal
estuvo signada por políticas desarrollistas-empresariales,
promovidas por organismos internacionales para Latinoamérica
tales como la OEA, el
FMI y el Banco Mundial.
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Esta
concepción coincidió, en los años 60 y 70, con el proceso de
proscripción de las mayorías populares y la irrupción de
gobiernos militares. Desde otro posicionamiento, y como
resistencia a las dictaduras de la etapa, crecía en clave
emancipatoria, la educación popular freiriana de jóvenes y
adultos. |
A partir de 1973, y luego del retorno
democrático en Argentina, se asumió una
perspectiva popular para la educación de jóvenes
y adultos, enfatizando una formación solidaria y
comprometida de docentes y estudiantes. En este
contexto nace la Dirección de Adultos, siendo
numerosos los logros en este campo, como la
actualización de los Centros de educación del
nivel secundario (Cens) conveniados con
sindicatos y la Campaña de alfabetización
(Crear). A los pocos años, la dictadura
cívico-militar (1976-83), intervino la Dirección
a través de desapariciones forzadas, cesantías
de docentes, y persecuciones a estudiantes y
educadores populares.
Luego del
retorno democrático (1983) y durante la década de los '90,
la reforma educativa de inspiración neoliberal trajo como
consecuencia el deterioro institucional y la pérdida de
identidad, "escolarizando la educación de jóvenes y adultos
secundaria" (Finnegan, 2016). Este proceso tuvo una fuerte
resistencia por parte de los docentes y sus gremios (CTERA).
Ya el marco de
la crisis del 2001, la retracción del Estado y deterioro de
la EDJA generó la reacción de numerosos movimientos
sociales. Empresas recuperadas, organizaciones sociales y
equipos de educadores de universidades públicas, asumieron
la creación de "Bachilleratos populares para jóvenes y
adultos", con la finalidad de que la población "expulsada de
las escuelas" retomara sus estudios desde la perspectiva de
la educación popular, señalando como objetivo "la formación
de sujetos críticos y comprometidos con la realidad de sus
comunidades" (Moñino, 2020).
Fue durante
este período que se sancionó la Ley Nacional de Educación
(26.206/06). En sus consideraciones destacaba la "educación
permanente de jóvenes y adultos como responsabilidad del
sistema educativo", y enfatizaba que ésta debía asumir un
criterio de "formación integral". En esta dirección hacia el
2008/10 se implementó un "Plan Nacional de Finalización de
Estudios Primarios y Secundarios" (Fines), que también contó
con la articulación de numerosas organizaciones
territoriales, especialmente del conurbano bonaerense.
Hoy, a 50 años
de la creación de la Dirección de Adultos, los Cens
conveniados, los Bachilleratos Populares y el Fines,
organizados en momentos y con alcances diferentes,
constituyen parte de un amplio y heterogéneo abanico de
propuestas de formación. Entre desafíos, conquistas y tareas
pendientes se destacan, mayoritariamente, las metas de la
educación pública y popular, basadas en "históricas
tradiciones cooperativas y solidarias de la EDJA de cuño
freiriano" que aspiran lograr una formación integral para el
trabajo y la educación superior (Ampudia, 2015). Sin duda
que es mucho lo que aún queda por hacer, y así lo debaten,
construyen y lo hacen saber sus protagonistas de manera
cotidiana y permanente.
Para terminar,
un recuerdo histórico: Paulo Freire en 1989 fue Secretario
de Educación de San Pablo, desde su gestión cuestionó el
modelo neoliberal de instrucción de la escuela empresarial y
meritocrática. Por eso invitaba a construir una escuela
pública y popular: "que sea tanto un lugar de elaboración y
construcción del conocimiento, como también de organización
política-formativa de las clases populares, basadas en la
solidaridad de clase y que incentive la participación del
pueblo en la creación del saber... y sea instrumento de
lucha y participación..."(Freire, Documentos SP, 1989)
Siempre es
bueno recordar nuestra propia historia regional,
especialmente en estos tiempos.
Roberto
Elisalde
Profesor e investigador de la
Facultad de Filosofía y Letras (UBA)
Dr. en Historia (UNLP), posdoc en Educación e integrante de
la Red de Investigadores y Organizaciones Sociales de
América Latina
(Riosal Clacso)
Fuente:
Telam
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