el juez Rafecas
recorrió la casa donde funcionó un centro clandestino
Visita al CCDTyE
de Bacacay
22/07/2020
- La Directora Nacional de Sitios y Espacios de Memoria,
Lorena Battistiol, participó junto al juez federal, Daniel
Rafecas, a Paula Álvarez Carreras y a Claudia Lencina (ambas
integrantes de la Dirección de Asuntos Jurídicos Nacionales)
de una visita ocular al inmueble de la calle Bacacay 3570,
identificado como ex centro clandestino de detención
durante la última dictadura cívico-militar
(1976-1983). El reconocimiento del lugar se realizó el
martes 14 de diciembre con la participación de
sobrevivientes, los cuales pudieron identificar algunos
sectores de la vivienda en donde permanecieron secuestrados.
El inmueble comparte manzana con el ex CCDTyE
“Automotores Orletti”.
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Fue en el año
2020 que el Juzgado Federal 3 confirmó que en esta actual
casa de familia, funcionó un centro clandestino de detención
durante la última dictadura cívico militar. La información
que le dio entidad a este hallazgo fue revelada por
documentos que el gobierno de Estados Unidos desclasificó,
quitándole su condición de secretos |
En un de dichos
documentos
se registra que este inmueble fue alquilado para operaciones
oficiales de la SIDE y que desde allí operó una de las
patotas lideradas por Aníbal Gordon. Asimismo, fue
determinante la coincidencia de croquis presentados ante la
justicia, uno realizado por quienes compraron el inmueble en
el año 1977 y el otro por una de las sobrevivientes, sumado
a los testimonios de otras sobrevivientes que coinciden con
la descripción de los espacios del edificio.
Haciendo un poco de historia
La noticia del mes de
julio del año pasado decía simplemente: "Identifican un
nuevo centro clandestino de detención en Floresta, cerca de
Orletti. La vivienda, actualmente una casa de familia, fue
identificada por sobrevivientes y mediante documentos
desclasificados por el gobierno de EEUU sobre la última
dictadura. Está en la misma manzana en la que funcionó el
centro "Automotores Orletti". El juez federal Daniel Rafecas
fue quien identificó el inmueble que habría funcionado como
centro clandestino de detención durante la última dictadura
cívico militar y dispuso la "prohibición de innovar" para
que no sufra alteraciones, además de ordenar un registro
fílmico y fotográfico de su sótano.
"Hicimos un
descubrimiento importante para avanzar en las
investigaciones. Veníamos con muchos testimonios que nos
indicaban que existió un centro clandestino de detención que
dependía de la SIDE y que estaba muy cerca de Automotores
Orletti, otro lugar de reclusión por el cual hubo un juicio
varios condenados".
"Pero
hasta el momento no podíamos descubrir dónde se encontraba",
sostuvo Rafecas en diálogo con AM 750 al confirmar esta
hallazgo.
La vivienda es
actualmente una casa de familia y está ubicada en la misma
manzana en la que funcionó el centro clandestino de
detención "Automotores Orletti", informaron a Télam fuentes
judiciales.
En el lugar
hay un pequeño sótano en el cual habrían sido alojadas
personas secuestradas, según testimonios que constan en la
causa penal.
Según la
pesquisa, en la casa ubicada en Bacacay 3570 habría
funcionado un centro clandestino de detención dependiente de
la ex Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) en la
dictadura, al mando del fallecido general del Ejército Otto
Paladino.
La
investigación es parte de la megacausa por violaciones a los
derechos humanos cometidos en el ámbito del Primer Cuerpo
del Ejército, vinculada a delitos de lesa humanidad en el
centro de detención "Automotores Orletti" en Floresta.
El centro
clandestino de la calle Bacacay habría funcionado con
anterioridad o en simultáneo a "Orletti" y el dato de su
existencia surgió por testimonios de sobrevivientes que
hasta el momento no habían podido precisar su ubicación
exacta.
Pero el
juzgado recibió documentos desclasificados por el gobierno
de Estados Unidos sobre la dictadura en Argentina y allí se
hizo mención precisa al domicilio ahora identificado.
El inmueble
habría sido alquilado por la SIDE hasta 1977, cuando se
vendió.
Los
testimonios en la causa indican que las víctimas "eran
introducidas encapuchadas, alojadas en habitaciones
precarias o en el pequeño sótano de la propiedad, y
sometidas a torturas con picana en una habitación
acondicionada para ello", explicaron fuentes del caso.
Además, "no se
descarta que este sitio haya servido también para las
operaciones del llamado 'Plan Cóndor', no sólo por su
vinculación con Automotores Orletti sino porque el relato de
una de las víctimas da cuenta de que allí se alojaban
detenidos uruguayos", se agregó.
En la causa
hay declaraciones de dos víctimas, realizadas en forma
remota durante el período de aislamiento social, preventivo
y obligatorio por el coronavirus, que describieron el
inmueble de manera coincidente.
Fuentes de la
Secretaría de Derechos Humanos contaron a Télam que desde
hace dos años se maneja información con respecto a la
existencia de este lugar, que varios represores de Orletti
habían aludido como "El Jardín" o "La Cueva".
La primera
información sobre ese centro que funcionó como parte de la
estructura represiva que se centraba en Orletti la dio la
sobreviviente Mercedes Naveiro (ya fallecida), quien
confirmó que estuvo en una casa con "dos cocinas".
Con esos
datos, el juzgado a cargo de Rafecas inició una
investigación y dio con María Ester Poggi, quien junto a su
esposo compró esta vivienda en 1977 y tiempo más tarde le
hicieron reformas y descubrieron que había un sótano en ese
lugar.
La mujer hizo
un croquis de la vivienda, brindó detalles de su ubicación
en el barrio de Floresta y esos datos coincidieron con la
información que aportaron dos sobrevivientes que pasaron por
ese centro clandestino.
Los
testimonios previos y de los compradores de la casa en 1977
Se trata de
Emma Lebozec y Ana Larrea de Jaroslavsky (residente en
París), quienes realizaron en mayo pasado una descripción
por videoconferencia que confirmaba los datos del inmueble
que tenían en el juzgado.
"Ninguna de
las dos mujeres sabían dónde habían estado. Es más, pensaban
que habían estado alojadas en la Comisaría 50 de la Capital
Federal", indicaron desde el Juzgado Número 1 a cargo de
esta causa.
Además, los
compradores de la casa en 1977 fueron ubicados y declararon
en el juzgado que cuando ingresaron a la propiedad
"encontraron en el sótano unos zapatos de mujer sucios y de
color rosa viejo y también zapatos de hombre".
Carlos Davis
Fuente:
Argtentina.gob.ar - Telam - Notas de archivo propio