BUENOS AIRES 
					VISTA DESDE LA ALTURA
					
					Visita a los 
					miradores porteños
					
					15/01/2020
					- La 
					Dirección General de Patrimonio e Instituto Histórico del 
					Gobierno 
					porteño, a través de su Programa 
					Miradores de Buenos Aires, invita a las visitas guiadas gratuitas que se realizarán durante 
					el mes de enero a varios rascacielos de la Ciudad: 
					"Restaurante Zirkel - Club Alemán", "Galería Güemes 
					Nocturna", "Basílica Santa Rosa de Lima",  "Torre Monumental" y "El 
					Chalecito" (antigua construcción perteneciente a la 
					"Mueblería Diaz" que puede observarse desde las 
					inmediaciones del obelisco). Las vacantes son 
					limitadas por lo que se requiere inscripción previa. El programa tiene por 
					objetivo el rescate de edificios de gran altura.
                  
                    
                      | 
                       | 
					El Programa 
                    “Miradores de Buenos Aires” propone el rescate progresivo de 
                    varios edificios porteños que por su 
					singularidad resultan representativas de 
                    las distintas épocas del desarrollo urbano. 
                    Intenta, a través de la fascinación que los miradores 
                    provocan en el visitante, una mayor comprensión de la  
                    ciudad.  | 
                  
					
											
					
					
					
					La actividad es 
					gratuita y los 
					cupos limitados, razón por la cual se solicita realizar la 
					reserva pertinente completando un formulario web. A dicho 
					documento se accede haciendo click en "Inscripción", vínculo 
					que se encuentra al final de la reseña de cada visita. El 
					día de la visita debemos presentarnos en el punto de 
					encuentro con 10 minutos 
					antelación. 
					
					El Programa “Miradores de Buenos Aires” 
					intenta una mayor 
					comprensión de la Ciudad desde su magnitud y crecimiento 
					urbano, observado desde lugares privilegiados; en el camino 
					permanente del conocimiento del Patrimonio Histórico 
					Cultural, etapa insoslayable dentro de la construcción de 
					nuestra identidad.  
					
					Inscripción y Cronograma de 
					visitas del mes de agosto
					
					Las inscripciones son 
					individuales y deben realizarse a través del formulario 
					descripto en el párrafo anterior. El mismo se habilita una 
					semana antes de cada visita hasta completar el cupo. Si necesitamos  
					información extra podemos llamar al 4339-1900 int. 
					126/127 de lunes a viernes de 11 a 17 hs.
					
					
             Martes 21 - 16 hs 
					- Restaurante 
					Zirkel - Club Alemán
  
					Martes 21 - 16 hs 
					- Restaurante 
					Zirkel - Club Alemán
					
					Cupo 25 
					personas
					Punto de encuentro: Corrientes 327, en el hall 
					central.
					Coordina: Guadalupe Torrijo (No se suspende por 
					lluvia)
					Inscripción: haciendo 
					
					
					click aqui
					
					
             Martes 21 - 20 hs - Galería Güemes 
					Nocturna
  
					Martes 21 - 20 hs - Galería Güemes 
					Nocturna
					
					Cupo 20 personas
					Punto de encuentro: Florida 165, PB, debajo de la 1ª cúpula
					Coordina: Delfina 
					Patrón Arrussi (NO se suspende por lluvia) 
					Inscripción: haciendo 
					
					
					click aqui
					
					
             Viernes 24 - 17 hs 
					- Basílica Santa 
					Rosa de Lima
  
					Viernes 24 - 17 hs 
					- Basílica Santa 
					Rosa de Lima
					
					Cupo 30 
					personas
					Punto de encuentro: Av. Belgrano 2216, en el atrio.
					Coordina: Daniel Vega (Se suspende por lluvia)
					Inscripción: haciendo 
					
					
					click aqui
					
					
             Martes 28 - 15:45 hs -
					Torre Monumental
  
					Martes 28 - 15:45 hs -
					Torre Monumental
					Cupo 25 personas.
					Punto de encuentro: Av. Dr. José María Ramos Mejía 
					1315
					Coordina: Néstor Zákim y Mónica Sanjurjo (Se 
					suspende por lluvia)
					Inscripción: haciendo 
					
					
					click aqui
					
					
             Viernes 31 - 17:30 hs
					- 
					El Chalecito
  
					Viernes 31 - 17:30 hs
					- 
					El Chalecito
					
					
					Cupo 20 personas
					Punto de encuentro: Sarmiento 1113
					Coordina: 
					Nestor Zakim y Delfina Patron Arrussi (Se suspende por lluvia)
					Inscripción: haciendo 
					
					
					click aqui
					
					Solo podrá asistir quien 
					haya completado la inscripción. 
					En caso de no asistencia se solicita comunicar 
					dicha eventualidad por Eventbrite.  
					
					Restaurante "Zirkel" 
					del Club Alemán
					
					En el piso 22º del 
					edificio, con una implantación privilegiada en el borde 
					superior de la barranca natural costera de la Ciudad, antes 
					de los rellenos, logramos una observación integral del 
					estuario del Río de La Plata y a través de los 
					aventanamientos longitudinales de las fachadas, una visión 
					del paisaje de la Ciudad hacia todos sus puntos cardinales.
					
					Historia de la 
					Galería Güemes
					
					La Galería Güemes, al 
					igual que otras Galerías de fin del siglo XIX y principios 
					del XX, fue concebida al estilo de los grandes espacios 
					europeos, que eran lugares de encuentro, de esparcimiento y 
					donde, además de las compras, sucedían acontecimientos 
					sociales; eran los predecesores de los actuales shoppings.
					
					
					El edificio Galería 
					Güemes es considerado uno de los primeros rascacielos de 
					Buenos Aires con sus 87 metros de altura. Al 
					visitante de aquellos años lo sorprendía la variedad de usos 
					y funciones que albergaba en su interior. En el subsuelo un 
					teatro y un importante salón de eventos y restaurante. En la 
					planta baja la Galería con locales comerciales y variada 
					gastronomía. Desde el primer piso oficinas, y a partir del 
					6º nivel se encontraban los departamentos totalmente 
					amueblados que se alquilaban temporalmente. Al llegar al 
					piso 14º se encontraba uno frente a la confitería que tenía 
					vistas a la ciudad y donde sonaban los acordes de una 
					orquesta que tocaba desde un balcón interno del salón. 
					Cuatro niveles más arriba el mirador, punto más alto de la 
					ciudad durante varios años con una vista única de 360 grados 
					en pleno centro de la ciudad. 
					
					Todo ello acompañado 
					por alardes técnicos como ascensores capaces de recorrer 140 
					metros en 60 segundos, sistemas contra incendios que 
					bombeaban hasta 24 mil litros por hora y que eran activados 
					a través de alarmas eléctricas ubicadas en la planta baja y 
					los subsuelos. Los distintos sectores contaban con 
					refrigeración, calefacción y ventilación forzada, y hasta 
					fue comidilla por indiscreto el tablero luminoso que 
					informaba acerca de la ocupación de las oficinas. 
					
					
					Un sistema de tubos 
					neumáticos servía de correo interno del edificio. 
					
					
					No menos impacto causó 
					la combinación de iluminación natural y artificial de la 
					bóveda y la broncería del pasaje, o los detalles de 
					broncería de los escaparates y de las puertas de los 
					ascensores. 
					
					El teatro contaba con 
					butacas montadas sobre una losa de hormigón armado que, a su 
					vez tenía apoyo pivotante capaz de cambiar la pendiente de 
					la sala. 
					
					El conjunto causaba una 
					impresión verdaderamente futurista teniendo en cuenta que 
					corría el año 1915. 
					
					Los promotores de la 
					obra fueron los salteños Emilio San Miguel y David Ovejero, 
					dueños de gran fortuna y propietarios de la casona de 1830 
					que había en el terreno sobre Florida. Al principio se pensó 
					en realizar la obra tan sólo sobre esta calle, pero luego se 
					sumó al proyecto el Banco Supervielle, propietario del lote 
					que miraba a San Martín. Se optó entonces por un 
					edificio-pasaje que conectara ambas calles mediante una 
					Galería de 116 metros. 
					
					El emprendimiento fue 
					encomendado al arquitecto italiano Francisco Terencio 
					Gianotti. La Galería Güemes fue considerada una de las obras 
					cumbres de Art Noveau. 
					
					La construcción comenzó 
					en 1913, y debió afrontar no pocos problemas, pues sus 
					propietarios quedaron en bancarrota por el costo de la obra 
					que subió de 10 a 15 millones de pesos fuertes, situación 
					agravada cuando un submarino alemán hundió el barco que 
					traía los mármoles italianos para la fachada sobre Florida y 
					otros costosos elementos para su terminación. 
					
					El nombre del edificio, 
					rinde homenaje al máxime héroe de la provincia de Salta, 
					General Martín Miguel de Güemes. El 15 de Diciembre de 1915, 
					la inauguración fue organizada por el Círculo de la Prensa y 
					a ella asistieron el Presidente de la Nación Dr. Victorino 
					de la Plaza (de origen Salteño), otras autoridades y 
					descendientes del General Güemes.
					
					Basílica Santa 
					Rosa de Lima
					
					La Basílica Santuario 
					Nacional de Santa Rosa de Lima es un templo católico 
					(inaugurado en octubre de 1934) que se encuentra en el cruce 
					de la Avenida Belgrano con la calle Pasco. Fue obra del 
					arquitecto Alejandro Christophersen, quien le dio un estilo 
					que él catalogó como "románico-bizantino de Perigord" 
					habiéndose inspirado en la Catedral de Saint Front en 
					Perigueux, Francia. Esta elección se debió, en parte, a que 
					fue voluntad de sus principales donantes, como María Unzué 
					de Alvear.
					
					La cúpula está 
					sostenida por 18 columnas de mármol Cipollino griego de 
					tonalidad verde, haciendo juego con los zócalos y frisos 
					revestidos en mármol Tynos. Destinada a recibir un fresco en 
					su bóveda, originalmente fue de revestimiento de piedra. La 
					cúpula termina en una linterna en forma de torre que provee 
					de luz al templo. También las pilastras y columnas de sostén 
					de las galerías y el coro fueron realizadas en Cipollino.
					
					Torre Monumental
					
					El 18 de setiembre de 
					1909, el Congreso de la Nación promulgó la Ley N0 6.368 por 
					la cual se aceptó el ofrecimiento de los residentes 
					británicos de levantar una columna monumental en 
					conmemoración del Centenario de Mayo y delegó en la 
					Municipalidad de Buenos Aires la aprobación de los planos y 
					su ubicación.
					
					El 10 de diciembre del 
					mismo año, el Honorable Concejo Deliberante autorizó la 
					erección del monumento en la manzana comprendida entre las 
					calles Maipú, Paseo de Julio y la Plazoleta Saavedra.
					
					Se llamó a concurso 
					para seleccionar y premiar un boceto. El elegido fue el 
					presentado por el ingeniero Ambrose Poynter quien recibió el 
					primer premio de $ 2.000. La torre propuesta era de estilo 
					renacentista, ya que ésta era la tendencia arquitectónica 
					que imperaba en Inglaterra durante la época en que Buenos 
					Aires era fundada por segunda vez (siglo XVI).
					
					El 6 de mayo de 1910 
					muere Eduardo VII, razón por la cual Gran Bretaña no envía 
					delegación alguna a las fiestas del Centenario. Debido a 
					este suceso, la piedra fundamental recién fue colocada el 26 
					de noviembre de 1910, inaugurándose el monumento casi cuatro 
					años después: el 24 de Mayo de 1916. El apreciable retraso 
					sufrido en su ejecución se debió al comienzo de la primera 
					guerra mundial.
					
					La columna 
					conmemorativa del “Centenario de Mayo" fue mas tarde 
					conocida, de acuerdo con las características de la obra, 
					como "torre" y no como "columna". Es de forma cuadrangular y 
					está orientada hacia los cuatros puntos cardinales. La 
					compañía encargada de su construcción fue "Hopkins y Gardom" 
					y tanto el personal técnico como los materiales, salvo la 
					arena y el agua, fueron traídos de Inglaterra.
					
					Su altura total es de 
					75,50 m y consta de ocho pisos. La base mide 280 m2. y el 
					costo de la obra se calculó en 90.000 libras esterlinas.
					
					La torre se halla 
					emplazada sobre una plataforma con cuatro escaleras de 
					acceso. La entrada principal da al oeste y se encuentra 
					engalanada con emblemas del imperio inglés. Podemos 
					reconocer, entre otros: la flor del cardo (que a partir de 
					1540 se la reconoce como emblema nacional) la rosa de los 
					Tudor, el dragón rojo de Gales, el trébol de Irlanda, 
					etcétera.
					
					Sobre el friso, a la 
					altura del primer piso, se encuentran alternados los escudos 
					de Argentina y de Gran Bretaña; también un león y un 
					unicornio rampantes, emblemas de Inglaterra y Escocia 
					respectivamente y dos frases escritas en francés: "Dios es 
					mi derecho" y "Deshonor al que piense mal de esto".
					
					A 50 m de altura se 
					encuentra la terraza de la torre y sobre ésta se yergue el 
					reloj, cuyos amplios cuadrantes de 4,40 m. de diámetro están 
					hechos con piezas de opalina inglesa.
					
					A raiz del conflicto 
					con Gran Bretaña por las Islas Malvinas e islas del 
					Atlántico Sur, la primitivamente llamada "Columna 
					Monumental", luego conocida como "Torre de los Ingleses" 
					pasó a ser denominada "Torre Monumental".
					
					El Chalecito
					
					En plena avenida 9 de 
					Julio, en la cima del edificio ubicado en Sarmiento al 1113 
					se alza una de las curiosidades porteñas que más sorprende: 
					un chalet. Un chalet de estilo marplatense, pero ubicado en 
					el techo de una de esas construcciones típicas del 
					microcentro. 
					
					Hacia fines del siglo 
					XIX, Rafael Díaz, un joven inmigrante que después de haber 
					trabajado de mozo era vendedor en una mercería de la calle 
					Chacabuco, trabajaba todo el día y dormía junto al mostrador 
					del negocio o sobre él. Pasaron los años, y Díaz, con su 
					esfuerzo, escaló la pirámide social y se convirtió en el 
					dueño de una mueblería que ocupaba el edificio de Sarmiento 
					1113/17. En 1927, la frutilla del postre: inauguró un chalet 
					–similar a uno que había visto en la Mar del Plata de la 
					belle époque– construido en la azotea o, para que suene más 
					glamoroso, en la cima: dos plantas (más de 200 metros 
					cuadrados) y altillo. Un chalet algo raro, sobre todo por su 
					ubicación. Las razones son prosaicas: Díaz vivía en Banfield 
					y viajaba en tren hasta el centro todos los días; no podía 
					volver a su casa cada mediodía para comer y tirarse un rato. 
					En el chalet, su segundo hogar, pudo almorzar y dormir la 
					siesta. Por las noches, volvía a Banfield en tren.
					
					
					
					
					
					
                  					
                  					
                  					Carlos Davis
					
					Fuente: 
					
					Programa 
					Miradores de Buenos Aires - Sitio Oficial Galerías Güemes - 
					Diario Clarin - Notas de archivo propio