UNA SEMANA PARA
TOMAR CONCIENCIA DE ESTE MAL
Concientizándonos sobre ACV
23/10/2019
-
La Legislatura porteña dispuso que los últimos días
de octubre de cada año serán de concientización, prevención
y difusión del Ataque Cerebro Vascular (ACV),
la segunda causa de muerte en la Argentina.
Esta "Semana sobre la concientización del ACV"
fue aprobada
en adhesión a la fecha instituida por la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
El diputado José Luís Acevedo (VJ), presidente de la
Comisión de Salud, comentó que cada
cuatro minutos una persona sufre un ACV,
y nueve de cada diez afectados
padecerá algún grado de discapacidad posterior, aunque el
80% de los casos podría prevenirse.
|
En
los fundamentos del proyecto
podemos leer que el (ACV),
es una enfermedad que se
caracteriza por la presencia
de un déficit neurológico de
inicio súbito, ocasionado
por una disminución del
flujo sanguíneo cerebral
(infarto), o bien por la
extravasación de sangre por
ruptura de los vasos
(hemorragia). |
De acuerdo a
datos de la Organización Mundial de la Salud, 15 millones de
personas sufren un ACV por año en todo el mundo. De éstos,
mueren 5 millones y otros 5 millones quedan con una
discapacidad permanente.
El ACV
es la segunda causa de muerte luego de la cardiaca y
la primera causa de discapacidad. Por cada ACV sintomático,
se estima que hay 9 “infartos silentes” que impactan en el
nivel cognitivo de los pacientes en forma crónica. Entre 80
y 85% de los ACV son isquémicos, mientras que del 15 al 20%
restante son hemorrágicos: hematomas intracerebrales y
hemorragias subaracnoideas. El riesgo de repetir un ACV es
del 26% en los primeros 5 años y del 39% dentro de los 10
años.
Se estima que en
nuestro país ocurren entre 130.000 y 190.000 ACV por año, es
decir, uno cada 4 minutos. El 30 % de las personas fallecen
el primer mes, lo que significa de 39.000 a 60.000 muertes
anuales en Argentina por esta causa. Los factores de riesgo
son: hipertensión arterial, tabaquismo, diabetes, alcohol y
dislipemia.
El 77% de los ACV
corresponden a un primer evento, lo que pone de manifiesto
la importancia de la prevención primaria. El ACV constituye
una urgencia médica que requiere una intervención
diagnóstica y terapéutica inmediata. El infarto tarda
algunas horas en desarrollarse y este tiempo, denominado
ventana terapéutica, supone una oportunidad para evitar o
minimizar el daño cerebral. Los estudios han demostrado que
si en las primeras horas se consigue bloquear los procesos
metabólicos que conllevan a la muerte neuronal se reduce el
área de necrosis y por lo tanto la morbilidad y la
mortalidad asociada al ACV.
La trombolisis con
drogas endovenosas y la trombectomía mecánica endovascular
pueden lograr el objetivo de limitar el daño cerebral tras
una oclusión arterial cerebral si se adoptan en tiempo y en
forma una serie de acciones coordinadas entre distintos
actores de la salud. En el año 1998 se publicó el primer
trabajo que demostraba la mejor evolución de los pacientes
con ACV de tipo isquémico que reuniendo criterios adecuados
eran tratados con una droga trombolítica denominada rTPA,
instilada por vía endovenosa dentro de las 3 horas de inicio
de los síntomas.
En el 2008 otro estudio
demostró que en un grupo de la población, esta ventana
terapéutica se podía ampliar a 4,5hs. En el año 2015 se
publicaron simultáneamente 5 trabajos diferentes que
demostraron que, en pacientes con ataque cerebral generado
por oclusión de arterias proximales (carótida y cerebral
media), el tratamiento endovascular para extracción del
trombo causante del ataque cerebral mejora en forma
significativa la evolución de esos pacientes.
La mejoría clínica de
los pacientes con ACV impacta directamente en los costos en
la atención de los pacientes efectivamente rescatados ya que
el tiempo de permanencia en sistemas de internación aguda,
subaguda, crónica o de rehabilitación a largo plazo
modifican drásticamente estas variables.
Situación en
Argentina:
Falta
de difusión de los factores de riesgo de la enfermedad
cerebrovascular.
Muchos
pacientes llegan fuera de la ventana terapéutica a los
centros de salud por falta de alarma en el domicilio o por
demoras en los sistemas de traslado no entrenados para esta
entidad.
Algunos
pacientes llegan dentro de la ventana terapéutica a centros
de salud que no poseen la tecnología para realizar el
diagnóstico (tomógrafo)
Algunos
centros de salud que poseen tomógrafo no tienen la droga
rTpa en la farmacia para administrársela a los pacientes que
se diagnosticaron en ventana terapéutica.
Algunos
centros de salud que poseen tomógrafo y han sido provistos
de rTpa no presentan personal suficientemente adiestrado
para lograr administrar la droga dentro de los tiempos
establecidos.
Los
pacientes con ACV generado por oclusión de una arteria
proximal (carótida o cerebral media) que llegan a centro de
salud con tomógrafo, rTpa y personal entrenado reciben un
tratamiento insuficiente a menos que ese centro de salud
tenga una sala de hemodinamia con un equipo de
neurointervencionismo que pueda realizar la trombectomía
endovascular dentro de las 6 hs de
inicio de los síntomas.
Por ello es
necesario:
Establecer
políticas de educación y prevención mediante la difusión
masiva de los factores de riesgo con el objetivo de educar a
la población en general y al personal ligado a la salud en
particular. Fundamento: con
estas medidas se reduciría significativamente la incidencia
de la patología. Las personas que logran un cambio en el
estilo de vida tienen un 80 % menos de riesgo de sufrir un
ACV que aquellos que no lo logran. El uso de medidas
preventivas ha logrado una disminución del 40% de ACV en
Oxforshire (Reino Unido) en los últimos 20 años.
Incorporar
el código ACV a los sistemas de traslado de emergencia
públicos y privados, esta medida priorizará la atención de
estos pacientes y el traslado se realizará a centros
especializados en tiempo y forma. Fundamento: está
demostrado que el tiempo es el factor primordial para el
diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad por lo que como
el estado debe asegurarse que todos los habitantes tengan
acceso al mismo ya sea en el ámbito público como privado, es
necesario que el traslado de los pacientes esté asegurado a
través de una red eficiente.
Incorporar
el código ACV en todos los sistema de emergencia públicos de
manera que una vez realizada la TC y angio TC de cerebro en
los pacientes se comience rápidamente con la infusión
endovenosa del agente trombolítico en el centro aunque luego
ese paciente sea trasladado a otro centro con hemodinamia.
Fundamento: Aunque se describe una ventana
terapéutica de 3 hs, se ha demostrado
que cuanto antes comienza el tratamiento mayor es la tasa de
éxito del mismo.
Acreditar
Centros Médicos públicos y privados que posean el recurso
humano especializado y la tecnología adecuada (tomógrafo y
hemodinamia) para el diagnóstico y tratamiento de
emergencia. (prevención secundaria).
Fundamento: La manera de optimizar los recursos es
el trabajo a través de redes. Todos los centros de salud
deben estar conectados en forma que una vez diagnosticado el
paciente se inicie el tratamiento inicial y/o el traslado
del paciente a un centro acreditado para el tratamiento de
esta entidad.
Acreditar
Centros de rehabilitación especializados (prevención
terciaria). Fundamentos: Aquellos pacientes que no
respondan a la terapéutica o respondan parcialmente y queden
con algún tipo de secuela deben ser rápidamente evaluados y
transferidos a centros de rehabilitación con el fin lograr
una rápida recuperación y por otro lado lograr un alto giro
cama en los hospitales receptores de estos pacientes.
Carlos Davis
Fuente:
Prensa
Legislatura de la CABA