EXHIBE UNA GRAN COLECCIÓN DE OBJETOS UTILIZADOS DURANTE SU
CARRERA
El Museo de Doña
Petrona
20/11/2017
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La
Ciudad de Buenos Aires se caracteriza por su gran cantidad
de museos, la mayoría de ellos gratuitos o de precios
accesibles. Hay museos de arte, de trenes, de calcos, de
historia, de autos... y ahora sumamos otro, el referido a
una figura casi mitológica: Doña Petrona C. de Gandulfo.
Creadora de un personaje que supo popularizarse a través de
la radio y luego la televisión. Doña Petrona fue la primera
mujer en cocinar y compartir los secretor de la cocina con
sus miles de seguidores. Su libro fue un objeto de culto
para varias generaciones. Ahora, al transitar por su museo,
podremos ver los objetos que integran su iconografía.
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La
radio le dio popularidad, la misma que reafirmaba
llenando teatros para
enseñarle a
las mujeres que la seguían el secreto de las
"cocinas a gas". Se
dió varios lujos, entre ellos el de publicar sus
recetas en la revista “El Hogar”, donde firmaban relatos
escritores como Jorge Luis Borges, Roberto Arlt y Horacio
Quiroga, entre otros. |
Si bien
debutó en televisión gracias
al Canal 7, su
éxito definitivo llegó en
1960 de la mano del programa
"Buenas tardes, mucho
gusto". Allí también
apareció su ayudante,
Juanita Bordoy, quien
trabajaba en la casa de
Petrona como asistente
doméstica, y con quien
conformó una dupla
televisiva muy recordada.
Su
nombre
se
convirtió
pronto
en
una
marca
que
supo
cuidar,
al
punto
de
conservarlo
aún
después de enviudar y
casarse por segunda vez.
Alejada de los medios, pero
convertida en una auténtica
celebridad, Petrona murió en
1992, al cuidado de Juanita,
en su casa ubicada frente a
la Quinta Presidencial de
Olivos.
El museo de Doña Petrona.
Se encuentra ubicado sobre
la Av. Jujuy 1582,
en
una zona dominada por los
grandes bazares que proveen
a los restaurantes de la
ciudad.
El museo exhibe gran parte de los elementos
que utilizó Doña Petrona durante su carrera, tales como
palos de amasar, una batidora Kenwood (con su
manual), una máquina para hacer pastas
(antecesora de la Pastalinda, un
máquina hecha de hierro y madera), picos y mangas
reposteras, cocinas
antiguas, bandejas (una de ellas con detalles en oro)
y un gran pergamino enmarcado, firmado por decenas de
mujeres. De un televisor llega la voz inconfundible de
Petrona C. de Gandulfo, verdadero símbolo de la gastronomía
nacional.
La idea del museo se originó cuando
Richard Saavedra, dueño de la empresa de uniformes para
gastronomía Goody, contactó a los nietos (Marcela y
Alejandro) y les ofreció una parte del edificio de la
empresa para concretarla. “En 2016 habilité un aula para
diferentes cursos y la bauticé Doña Petrona. La muestra está
pegadita al aula y al patio Gato Dumas”, cuenta Richard,
quien ha confeccionado los uniformes de éste y otros famosos
chefs.
Además de contemplar un centenar de objetos vinculados con
la vida personal y pública de Doña Petrona, el público puede
ver programas de Buenas Tardes Mucho Gusto (donde cocinaba
junto con la inseparable Juanita Bordoy) y hasta adquirir
souvenirs, al estilo de los museos de Europa.
Nacida en 1898 en Santiago del Estero, Doña Petrona llegó a
Buenos Aires a mediados de la década del ’20 del siglo
pasado. Tras dejar su pueblo La Banda y animada por el deseo
de tener una salida laboral, fue la ecónoma estrella que
enseñó a las amas de casas a usar las nuevas cocinas a gas,
en reemplazo de las de leña y kerosene, que la Compañía
Primitiva de Gas estrenaba en el país.
Carlos Davis
Fuente:
Perfil - Clarin - Infobae - El Debate