Esta tarea debe
desarrollarse en un ambiente
sano, que permita un
desarrollo armonioso y
pleno, de individuos y
comunidades.
Es indudable que el llamado
"espacio público", entendido
como un ámbito geográfico -
social, ha sufrido
modificaciones,
transformaciones a lo largo
de los años. El espacio
público ha sido deconstruido,
desdibujado, casi disuelto
por las tendencias modernas
que ponen el acento en lo
individual por sobre lo
colectivo. El interés
personal prepondera de
manera excluyente sobre el
grupal, y el espacio que nos
rodea solo merece nuestra
mezquina apropiación cuando
podemos usufructuarlo.
La exclusión social con su
estela segregatoria,
expulsiva, aportó una cuota
de nuevos habitantes del
espacio público. Asi la
realidad se complejizó, se
hizo tensa, y el espacio
público fue cercado para
protegerlo, quedando todos
afuera. El espacio público
dejó de ser tal.
En general los vecinos se
opusieron al enrejado, más
allá de reconocer que el
problema de seguridad
existe. Entienden, sin
embargo, que las plazas no
son adornos, sino lugares de
pertenencia e interacción
social.
Asi surgió el Plan
Estratégico destinado a
promover el acceso libre a
los espacios públicos,
limitando todo tipo de
restricciones. Como
alternativa a las rejas, las
asociaciones de amigos de
las plazas se han presentado
como una valiosa
alternativa. No sólo se
habría de conservar el
espacio público sino que se
impulsaría la vinculación de
los vecinos entre si, y
entre ellos y el espacio que
comparten. La mejor defensa
de lo público la hace el
público.
“Con Compromiso Barrial,
logramos que cada barrio
fortalezca su identidad.
Cuidando el lugar de todos,
las buenas costumbres y las
ganas de participar se
contagian. Tenemos que ser
cada vez más, porque la
Ciudad que soñamos la
construimos entre todos”
explicó Paula Uhalde,
Titular de Construcción
Ciudadana y Cambio Cultural
del Gobierno de la Ciudad.
Desde que nació el programa
Compromiso Barrial se han
realizdo más de 143
Compromisos Barriales junto
a 860 organizaciones,
sumando a más de 10.00
vecinos.
¿Qué es Construcción
Ciudadana?
Construcción Ciudadana es
una construcción colectiva
integradora, que procura, a
través del diálogo
comunitario, alcanzar
acuerdos básicos de
convivencia, alentando la
participación cívica y
disfrutando de los bienes
públicos.
Queremos lograr una
ciudadanía participativa que
genere un cambio cultural en
donde todos trabajemos en
conjunto por el bien común y
formemos parte de la vida
colectiva de la Ciudad de
Buenos Aires.
Cada fin de semana los
vecinos tienen la
posibilidad de participar en
actividades comunitarias,
organizadas con el objetivo
de mejorar y embellecer su
barrio, y de esta forma
lograr una mejor calidad de
vida en el entorno. La idea
es fomentar el sentido de
pertenencia, promoviendo la
participación y el
compromiso de todos los que
viven y disfrutan de la
Ciudad.
Los vecinos que se anotan,
participan voluntariamente
de distintas acciones, como
la realización de pintadas
comunitarias a beneficio de
alguna institución barrial,
la puesta en valor de
espacios verdes, la limpieza
de esquinas críticas o el
embellecimiento de fachadas.
Todas las actividades son
realizadas con
organizaciones y líderes
barriales, y el Gobierno de
la Ciudad acompaña y actúa
como facilitador de las
herramientas necesarias para
que los vecinos puedan
llevar adelante esta
iniciativa. Los
participantes pueden sumarse
aportando lo que cada uno
sabe hacer.
Carlos Davis
Fuente:
Lic. Fiorella Zecchin Chiaia (Comunicación Construcción
Ciudadana y Cambio Cultural)