LA LEGISLATURA RECONOCE AL MAS GRANDE EN LA HISTORIA DEL ALBO

Reconocimiento para el Pepe Romero

19/12/2012 - Por iniciativa de la diputada María Elena Naddeo (Frente Progresista y Popular) la Legislatura porteña declaró al ex futbolista y actual director técnico del Club Atlético All Boys, José "Pepe" Romero, "Personalidad Destacada del Deporte". La plaqueta de reconocimiento le llegó al "Pepe" de manos de la propia Legisladora quien expresó: "Queremos reconocer por su trabajo y trayectoria a José Santos Romero, quién se transformó en uno de los ídolos más importantes en la historia del club del barrio de Floresta. Romero le rinde tributo a la gente de experiencia. Es un buen representante para los técnicos de esa generación".

Ese chiquito atrevido de apenas 16 años debutó el 9 de Marzo de 1968 frente a Excursionistas con la camiseta del Albo. En el año 1972 consiguió el logro máximo, tanto de él como de la institución de la cual es simpatizante: el Ascenso a Primera División con All Boys, siendo Pepe la figura del equipo con la camiseta número 10.

“Decían que jugaba bien, trataba de hacer lo que me gustaba, era muy chico y sabía que tenía mucho por aprender”, comenta humildemente José.

El ídolo, junto a su equipo, enfrentaba el duro camino de la Primera División, la categoría máxima del Fútbol Argentino. El amor que Pepe le tenía tanto a su Blanco y Negro como a la pelota hizo que, a raíz de una seguidilla de partidos y de las exigencias físicas, le dieran una inyección de vitaminas; luego del encuentro frente a Estudiantes de La Plata disputado por el Torneo Metropolitano en el año 1973. Todo parecía que iba a ser mejor, tenía 11 goles en pocos partidos en Primera A y Vélez y San Lorenzo de Almagro pusieron los ojos en él para contar con sus servicios. Incluso, empresarios españoles, representantes del club Málaga, viajaron exclusivamente a la Argentina para seducir monetariamente al Crack Albinegro y llevarlo al viejo continente. Pero esta aplicación vitamínica acentuó la hernia de disco que tenía en la columna vertebral y comenzó la pesadilla.

“Estaba todo bárbaro, me sentía cada vez mejor jugando, pero esa inyección de mierda me cagó la vida”, confiesa compungido. De ir de cancha en cancha luciendo su pegada formidable, pasó a ir de médico en médico buscando la solución a su problema. “Ojalá hubiera habido la tecnología que hay ahora para salvarme”, dice Romero haciendo referencia a que en ningún lado le daban otra alternativa más que la operación.

Pepe, en una decisión que le costó mucho, accedió a la intervención quirúrgica, “Me operé porque no me quedaba otra, los médicos me decían que sólo cabía la operación, me resigné y chau…”. Luego de casi un año inactivo, volvió a ponerse los cortos frente a Boca el 29 de Septiembre de 1974. Arrancó nuevamente y jugó hasta 1976, año en el que pasa a Témperley. Después de un año vuelve al club de sus amores, queda libre y firma con Almagro. Y en 1978 arriba a Almirante Brown para sólo jugar una temporada y dejar el fútbol.

“Nada era lo mismo, me mataron, no me volví a sentir como antes nunca más en una cancha”, Pepe era conciente de que ese gran momento futbolístico cada día quedaba más lejos. “Tuve que dejar lo que más quería por una mala praxis, estuve realmente muy mal”, cuenta el ídolo.

Después de más de dos años vuelve nuevamente al club Albo a trabajar en divisiones inferiores y en 1981, año en el que All Boys desciende de la Primera A a la B, en un intento por reencontrarse con su viejo amor: la pelota, juega sólo seis partidos y se retira definitivamente de la práctica profesional. “Intenté pero ahora sí que ya no era yo, por eso decidí dejar el fútbol y terminar con esto”, afirma José Santos siendo conciente de que ese no era el final que él deseó para su carrera.

Se retiró con 74 goles en 131 partidos jugados. En el año 2003 armó el selectivo de All Boys y en el 2005 asume como Director Técnico de la Primera División, teniendo la chance por primera vez de dirigir al equipo profesional. Los resultados no se dieron y las cosas tampoco marcharon como él quería. Motivo por el cuál volvió al selectivo. Pero en la vida siempre hay revancha, y más cuando se trata de una persona luchadora como es José Romero.

El 2 de Abril del 2007, luego de la renuncia de Néstor Ferraresi como Director Técnico por los malos resultados y el mal momento futbolístico, el Presidente del Club Albo: Roberto Bugallo, apostó a Pepe para dirigir nuevamente el equipo profesional. “Cuando asumí era optimista y sabía que íbamos a sacar al equipo de la mala situación que estaba”, y no se equivocó. José Santos Romero terminó la campaña 06/07 dando una muy buena imagen. Por eso el Presidente confió en la continuidad para el Campeonato 07/08 y, lo que había logrado en 1972, lo volvió a conseguir pero desde el banco de suplentes. Pepe se dio el gran gusto de ascender a All Boys a la B Nacional, ganando el certamen de punta a punta e imponiendo el juego lírico en todas las canchas.

Pocos años después la vida le daría otra gran alegría, el ascenso a primera, la vuelta del Albo a la máxima categoría, y allí si (por si hiciera falta confirmarlo) el Pepe Romero se convirtió en leyenda para la gente de Floresta, al punto de quedar eternizada su imagen en el bronce de una estatua que fue financiada por los aportes modestos de miles de hinchas agradecidos...

Carlos Davis

Fuente: Prensa Salvar a Floresta - Wikipedia _ All Boys locura