HINCHAS CON
ENTRADAS SE QUEDARON SIN VER BOCA - ALL BOYS
Pasión de
muchos, negocio de pocos
07/03/2011
-
El sábado 26 de
febrero no fue como cualquier otro día en la vida de los
hinchas de All Boys, ya que el equipo esa noche se enfrentó
a Boca en la “Bombonera”, lo que no ocurría desde 1980.
Tanta era la ilusión de ver ese partido, que las 4500
entradas que le otorgó el club de la ribera al “blanco” se
agotaron rápidamente.
El partido
para la gente que viajó en los micros que dispuso el club no
comenzó a las 21 hs, sino que se inició antes, a las 18.30
hs, cuando comenzaron a abrirse las puertas de los micros
que transportaban a la parcialidad visitante.
Lamentablemente, muchos hinchas albos se quedaron sin entrar
a pesar de tener el ticket.
 |
Al llegar
al estadio de la Boca, con ánimos de fiesta la gente de
All Boys fue superando uno a uno los controles
policiales, hasta dar con la entrada en sí de la
tribuna. Pero allí lo sorprendente no fue la emoción en
los rostros de los hinchas que iban por primera vez o
volvían a ese estadio, como se pensaba a priori
que iba a suceder.
|
La sorpresa fue ver a
los supuestos miembros de la “barra brava” del albo parando
el acceso para la gente normal y dejando pasar a sus amigos
sin entrada. Esto desencadenó que los que viajaron en los
primeros micros que llegaron a la Bombonera hayan ingresado
a la cancha con el partido ya empezado, y para peor, los más
perjudicados fueron quienes viajaban en los últimos micros
que partieron de Floresta a la cancha.
Claro, con el parate
producto de la misma hinchada del club, unas 300 personas
con entrada en la mano se quedaron sin poder ver el partido
desde la tribuna, ya que, por disposición del operativo
policial se cerró el acceso al estadio una vez que no hubo
más capacidad en la tribuna visitante. Este es un ejemplo
más de la impunidad con la que se maneja una hinchada, que
ya su función principal no es más la de alentar al equipo,
pareciera que sí lo es hacer negocio con la gente que paga
su entrada.
Si tenemos en cuenta
que muchos de los que se quedaron sin poder ver el partido
fueron hombres grandes y pequeños, la actitud tomada por
miembros de la “Peste Blanca” (barra brava de All Boys)
posibilita el alejamiento de las familias de Floresta a la
cancha para ver al club del cual son hinchas, es decir, que
con la reventa y las entradas “de favor” se benefician sólo
unos pocos, lucrando con la pasión de muchos hinchas y con
el club, con una ocasional policía cómplice que deja que
hagan y dejen hacer a su gusto lo que quiera la hinchada en
el acceso visitante. Igualmente esto no opacó la felicidad
de ver y seguir viendo al club en primera, y como decía un
viejo y conocido vecino del barrio “siga, siga el baile”.
Rodrigo F. Marcogliese
Fuente:
allboysdeprimera.com.ar