"El partido fue muy duro, debido a que Lin Ju ataca con mucha eficiencia y tiene paciencia en el juego. Sentí un poco la pierna, pero no fue problema para jugar. Me puse triste por la derrota y feliz por participar de la final", comentó el Song tras la caída.

El hombre de Floresta había dejado en el camino al ídolo brasileño Hugo Hoyama por 4-2, con parciales de 11-4, 11-7, 7-11, 11-7, 6-11 y 11-7.

Fue la segunda victoria de Song frente a Hoyama, el máximo ganador de medallas de oro (nueve) para Brasil en Panamericanos, ya que lo había derrotado en uno de los puntos de la final del dobles. Sin embargo, esta victoria no le alcanzó al equipo nacional para arrebatarle el oro a Brasil. El equipo argentino (compuesto por Pablo Tabachnik, Liu Song y Gastón Alto) obtuvo la medalla de plata al perder por 3 a 1, ante Brasil.

“A mí me gusta jugar por la Argentina”, señala el protagonista, de nombre y rasgos orientales, con una convicción y una sonrisa que jamás abandona; así, parece imposible no creerle. Liu Song es un jugador de tenis de mesa nacido en Guang Xi, China, que decidió representar a nuestro país en los principales torneos internacionales. Song (ése es su nombre, porque el apellido va en primer lugar) es el máximo representante que tiene la Argentina en esta disciplina.

La historia comenzó en 1990, cuando sus padres llegaron a Buenos Aires e instalaron una lavandería en Floresta; cinco años después, Song siguió los pasos de su familia y arribó a estas tierras. Lejos quedaba la China que dejó cuando era el N° 8 del ranking de un país que tiene el tenis de mesa como uno de sus deportes representativos. En Floresta aprendió a manejarse en un español aceptable (“cuando llegué, no hablaba una palabra”, recuerda). Compitió para Argentina en los Panamericanos de Winnipeg 99, donde obtuvo dos medallas plateadas (en singles y por equipos), y en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.

Me gusta mucho jugar para el público argentino. Siempre quiero ganar, no me importa si es un Panamericano, el Mundial o un Sudamericano. Ahora el objetivo es entrenar mucho para garantizar una plaza en los Juegos Olímpicos del próximo año".

Carlos Davis